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9 febrero, 2021

Entrevista a Freddy Vega, uno de los líderes innovadores menores de 35 en América Latina

El año pasado, la revista MIT Technology Review dio a conocer la lista de los nominados a los premios Innovadores menores de 35 Latinoamérica 2020, un reconocimiento que, como su nombre lo indica, busca resaltar la labor de los jóvenes que desde diferentes verticales se destacan como grandes transformadores de alto impacto para nuestra región.

Con este reconocimiento, MIT Technology Review en español premia cada año a jóvenes innovadores menores de 35 años destacando sus proyectos, dando muestra de las posibles direcciones que tomará la región a través de la innovación y construyendo una ruta sobre dónde nos llevará la tecnología en la próxima década. Los nominados son jóvenes que mediante diversos proyectos en la lucha para reducir la emergencia climática, mejorar la salud, combatir la desigualdad, entre otras, podrían estar a punto de cambiar el mundo.

En la actual edición Innovadores menores de 35 Latinoamérica 2020 se destaca en la categoría de Emprendedores Freddy Vega, cofundador de la plataforma educativa Platzi y uno de los principales promotores de la educación online como principal herramienta para el desarrollo de América Latina; con quien tuvimos la oportunidad de hablar para compartir con nuestros lectores su visión sobre el futuro de América Latina, la educación, y el emprendimiento en nuestra región. 

Su plataforma de educación online aumenta los ingresos de los alumnos y forma emprendedores tecnológicos; y ha impactado a millones de estudiantes hispanohablantes en todo el mundo.

Como emprendedor, innovador y líder de la educación online en la región, qué impacto representa la inclusión en esta competición global del MIT Technology Review organizada por Opinno.

Freddy Vega: Listas como la de 35 líderes de tecnología de menos de 35 son un recordatorio para la región del potencial que tenemos y del nivel de talento que existe. En Latinoamérica estamos acostumbrados a pelear por quién es el peor país, no necesariamente por resaltar quiénes son los casos de éxito que más están triunfando, y tener ese recordatorio de que aquí pasan cosas increíbles ayuda a que la próxima generación cree cosas aún más increíbles. 

¿Qué crees que le hace falta al ecosistema de emprendimiento en América Latina frente a las llamadas «cunas de la innovación» como Silicon Valley?

Freddy Vega: Lo que normalmente siempre faltan son dos cosas: dinero y talento. Pero yo creo que es más importante el talento que el dinero. Internet hace posible que una persona con una gran idea y la capacidad de ejecutarla, mientras tengo un computador conectado Internet, pueda crecer. Esa es la historia de Platzi, nosotros no tuvimos que levantar inversión al principio. Lo que sí hicimos fue un montón de iteraciones de nuestro producto. El segundo componente es capital de inversión, y la verdad es que en Latinoamérica ese capital existe, lo que pasa es que ese capital no siempre piensan en invertirlo en tecnología, si no que piensan en invertirlo en otro proyecto de edificios, otro proyecto de construcción.

Si nosotros logramos mover ese capital a invertir en talento tecnológico las cosas cambian. Nada importa más que aumentar la cantidad de personas talentosas porque la única forma escalable de solucionar la pobreza y avanzar nuestras naciones es que más personas tengan talento, sobre todo en una industria donde el desempleo no existe. Cuando hay tanta hambre de contratación lo que se tiene que hacer es suplirla con una gran cantidad de talento tecnológico avanzado y determinante que haga que estos proyectos ocurran. 

¿Cuál es la característica clave que debe tener sí o sí un emprendedor exitoso?

Freddy Vega: Una determinación inmensa por cumplir la misión incluso cuando todo sale mal o cuando uno no quiera trabajar. La razón por la que muchos emprendedores que quieren emprender por el hecho de ser jefe y no por cumplir la misión fracasan, es porque en el instante en el que las cosas se ponen difíciles se rinden, y por supuesto que lo hacen porque no creen en la misión. Porque no están listos a vivir la parte difícil. Todas las grandes historias de emprendimiento y tecnología han tenido grandes momentos de dolor y de fracaso, porque de otra manera no se puede crear algo nuevo, y de hecho, lo más probable es que un emprendedor fracase. Que triunfen es tan poco común, que hay premios.

¿Un cambio en los sistemas de educación actuales puede impulsar la economía de la región? 

La única forma de impulsar la economía de nuestra región a largo plazo es invertir en el talento que nosotros tenemos. No es que un cambio en la educación pueda impulsar la economía, es que es la única forma.

Eventualmente Latinoamérica va a dejar de generar ingresos con su economía de extracción y minería, vamos a tener que dejar de depender del petróleo, del carbón  y del gas natural, y vamos a empezar a tener que invertir en talento humano de nuestras naciones. Es lo que todos los países avanzados han hecho y nosotros vamos tarde. 

¿Por qué mientras se habla de la revolución de la educación online ha sido tan difícil para los alumnos de educación tradicional adaptarse a las clases virtuales durante la pandemia?

Las clases virtuales de educación tradicional no son educación online y no hacen parte la revolución de la educación online. Lo único que están haciendo es agarrar una videollamada para hacer lo mismo de siempre. La educación online moderna de verdad, requiere que replanteemos cosas desde la base como por ejemplo no hay necesidad de medir la educación en horas, no hay necesidad de estructurar la educación en años o en semestres.

Todos esos conceptos son vestigios de la Revolución Industrial de hace más de un siglo que no tienen sentido. En el mundo moderno la gente aprende a su propio ritmo, adaptado a sus propias habilidades y con entrenamiento completamente personalizado. Esa es la forma que la gente aprende en Platzi, por eso no funciona el simple hecho poner educación en videollamadas por Zoom, porque es hacer lo mismo de siempre con una webcam, y por supuesto que va a fracasar.

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