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Carlos Daniel

17 de mayo de 2015

Conoce la nueva generación de los molinos de viento: no tienen aspas

¿Aerogeneradores sin aspas?, ¿es posible? La respuesta es sí, una segunda generación de aerogeneradores que pueden generar la misma energía que los tradicionales, pero con un claro ahorro en costos de producción –explotación y otras ventajas medioambientales– paisajísticas está a punto de desembarcar en el mercado.

Estos son aerogeneradores totalmente diferentes a los actuales tanto en su forma como en la manera de generar energía. La simplificación del sistema consigue un ahorro en materiales, transporte y mantenimiento que hará que por el mismo dinero, se genere hasta un 40 por ciento más de energía.

Los tres socios de la empresa madrileña Deutecno –David Suriol, David Yáñez y Raúl Martín– han creado el proyecto Vortex: un sistema que evoluciona los aerogeneradores actuales de tres aspas a los aerogeneradores sin aspas.

En 2006, David Yáñez, presentó la primera patente. Desde ese momento no han parado de trabajar en este proyecto. Construyeron su propio túnel de viento para pruebas, donde han llegado a probar un prototipo de 3 metros. Hasta que este año, Repsol ha seleccionado el proyecto Vortex para su proceso de incubación de empresas. Así tendrán la oportunidad de convertir un proyecto de laboratorio en un producto de mercado.

El dispositivo consiste en un cilindro vertical semirrígido, anclado en el terreno, y que incluye materiales piezoeléctricos. La energía eléctrica se genera por la deformación que sufren esos materiales al entrar en resonancia con el viento.

Algunos de los beneficios de estos nuevos aerogeneradores son que no generan ruido, no producen interferencias con los radares, tienen un menor costo de materiales, montajes y mantenimiento. Además, reducen el impacto ambiental, son más eficientes ya que producen energía limpia más barata, y funciona ante un mayor rango de velocidades de viento.

En 2016 ya se podría tener la primera unidad de este aerogenerador sin aspas. El precio de mercado sería de unos 5500 euros.

Fuente | Diario Ecología

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