Fracttal: la historia detrás de un nombre que hoy suena en más de 50 países

Fracttal es hoy un nombre familiar para más de 50.000 usuarios en 35 países. Sus soluciones gestionan 20 millones de activos y procesan 30 millones de transacciones diarias. Han sido reconocidos por Deloitte, atraído inversión de más de US $10 millones y colaboran con gigantes como SAP, AWS y Oracle.

Pero su historia que nace en Chile en el 2014, comenzó de forma mucho más modesta, uniendo a dos ingenieros que compartían una misma frustración: la falta de herramientas accesibles para la gestión de mantenimiento industrial.

“Tuve la oportunidad de viajar a California y conocer San Francisco, Silicon Valley, Mountain View, Palo Alto, visitar estas grandes empresas tecnológicas. Ahí pude ver de frente el alcance que puede tener una idea. Fue algo realmente inspirador para mí”, recuerda Christian Struve, Confundador y CEO de Fracttal. “Esto me motivó a dejar de ser un implementador de soluciones hechas por otros, para convertirme en un desarrollador y comenzar a crear soluciones a los problemas que estaba viendo repetirse una y otra vez”.

En ese momento, Christian llevaba años implementando software de mantenimiento industrial para empresas grandes. Sabía lo que funcionaba, lo que no, y sobre todo, lo que no existía para las pequeñas y medianas. 

Al otro lado del continente, Alejandro Pérez, ingeniero electrónico y campeón nacional de robótica en Colombia, también había detectado el mismo problema: hospitales, fábricas y empresas enteras seguían gestionando el mantenimiento en papel o con hojas de cálculo.

Un correo electrónico los conectó, y decidieron crear algo nuevo. En su primera reunión acordaron tres cosas: el producto sería 100% en la nube, tendría una interfaz intuitiva y llevaría un nombre que transmitiera precisión y escalabilidad. Christian propuso “Fracttal”, inspirado en los fractales: patrones que se repiten con exactitud a cualquier escala. Con doble “t” para singularidad y alcance global, quedó bautizada la marca.

Los fractales no solo simbolizaban precisión y complejidad, también la capacidad de escalar manteniendo la calidad, algo que querían que su software reflejara desde el primer día.

“Fundamos Fracttal para resolver un problema real que veíamos todos los días: empresas que perdían tiempo y dinero por procesos obsoletos. Nuestra meta ha sido siempre hacer que la tecnología trabaje para las personas, no al revés”, resume Christian.

Primeras victorias

El prototipo los llevó a Start-Up Chile, donde ganaron el Demo Day 2015. Luego, con Start-Up Chile Scale, pudieron escalar el equipo y sumar clientes de peso.

En 2018, llegó un impulso decisivo: una inversión de USD 2 millones liderada por Scale Capital, a través del fondo Amérigo de Telefónica LATAM.

Hoy, Fracttal es un equipo que supera las 200 personas, con oficinas en Chile, Colombia, México, Brasil y España. Y aunque esas son sus “casas” formales, su huella llega mucho más lejos: Portugal, República Dominicana, Perú, Argentina, Uruguay, Paraguay, Ecuador, Bolivia.

Entre sus clientes hay gigantes que cualquiera reconocería: Renault, Unilever, Iberostar, Veolia, 3M, Coca-Cola, FedEx, Oxxo, Burger King. Lo curioso es que su tecnología no se quedó solo en las manos de corporaciones con presupuestos millonarios. También está en pequeñas y medianas empresas que antes ni soñaban con tener acceso a herramientas de este nivel.

Crecimiento sostenido

El esfuerzo ha tenido eco. En 2025, Fracttal fue reconocida en el Deloitte Technology Fast 50, en España, como una de las empresas tecnológicas de más rápido crecimiento. En 2023 cerró una ronda Serie B de US$ 10 millones liderada por Kayyak Ventures, junto a Seaya Ventures, Scale Capital, GoHub y Global Omnium

Han integrado su software FracttalOne con gigantes como SAP, Amazon Web Services y Oracle, incorporando algoritmos predictivos que anticipan fallos con hasta dos años de antelación. Todo con un enfoque claro: ayudar a empresas de sectores como manufactura, facility management, energía y salud a ser más seguras, competitivas y sostenibles.

Con la misma visión que los impulsó en 2014, siguen construyendo soluciones para que cualquier empresa, en cualquier lugar, pueda gestionar sus activos de forma inteligente. Como dice Christian: “Como empresa tecnológica, estamos permanentemente desarrollando soluciones innovadoras y proponiéndonos objetivos desafiantes, construyendo hoy lo que queremos ver mañana”.